Las 5 mejores plantas para favorecer la digestión

La fitoterapia puede ayudarle a digerir bien: Vamos al encuentro de cinco de las plantas más eficaces, de sus beneficios y de cómo consumirlas.

2020-01-06

Salud gastrointestinal Listas

Fotografía de una infusión para la digestión

Los problemas de digestión son siempre desagradables, y a menudo van acompañados de reflujos ácidos, de hinchazón abdominal, de náuseas, de dolor abdominal o de mal aliento... Hay soluciones naturales para digerir mejor, y entre éstas hay plantas con beneficios a veces insospechados: ofrecemos un panorama general de estas auténticas benefactoras.

La cúrcuma

Esta planta de mil beneficios es conocida por sus propiedades beneficiosas contra la dispepsia, es decir el conjunto de síntomas relacionados con una digestión difícil (1). Por otra parte, la cúrcuma posiblemente estimula la vesícula biliar (2): es ella la que es responsable de la liberación de la bilis (secretada por el hígado). La bilis tiene especialmente la función de emulsionar los lípidos para hacerlos más digestivos.

Además de espolvorear cúrcuma en sus platos, usted puede también hacer infusiones con ella, que hay que consumir una o dos veces al día.

La menta piperita

Esta variedad muy común de menta tiene beneficios reconocidos para los síntomas de indigestión. Es especialmente conocida por aliviar los espasmos gastrointestinales (dolor abdominal) y la hinchazón abdominal, especialmente cuando ésta está combinada con la alcaravea (Carum carvi) (3). La menta piperita se puede utilizar en infusión simple, poniendo las hojas secas en el agua hirviendo, para beberla cuando guste. También se puede utilizar su aceite esencial, todavía más concentrado y eficaz, diluyéndolo mucho (no más de una gota) en agua caliente y miel.

Atención: el consumo y el uso de aceites esenciales por regla general debe ser abordado con muchas precauciones. Ésta está prohibido para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia y para los niños pequeños, así como para ciertas personas que padecen diversas afecciones. Es indispensable pedir consejo a su farmacéutico para evitar cualquier riesgo.

La alcachofa

Está demostrado: el extracto de hojas de alcachofa alivia la indigestión. Éste estimula el hígado y la producción de bilis, y permite una digestión más serena (4). Para profundizar, la alcachofa alivia las manifestaciones del síndrome del intestino irritable (5), una afección que no es grave la mayoría de las veces: calambres intestinales, hinchazón intestinal dolorosa, estreñimiento o diarrea...

La alcachofa puede tomarse en infusión de flores secas, o como complemento alimenticio, que contiene su principio activo principal en cantidad concentrada, la cinarina.

El cardo mariano

El interés terapéutico de esta planta reside en la silimarina: un complejo antioxidante que agrupa a varios componentes de la planta, y que representa su principal principio activo. La silimarina tiene efectos protectores y depurativos en el hígado, además de activar la regeneración de sus células (6). Ésta está también reconocida oficialmente por sus efectos calmantes de los trastornos gástricos (7).

Sus semillas se consumen directamente o en infusión. También hay extractos concentrados de silimarina en complementos alimenticios.

El iberis

El iberis es una planta algo secreta, sin embargo conocida por sus potentes efectos sobre la acidez del estómago y el dolor abdominal. Ésta también estimula las contracciones intestinales, indispensables para un circuito digestivo funcional. Además, ésta limita los efectos secundarios a nivel digestivode algunos tratamientos (8).

Se encuentra como complemento alimenticio, combinada con otros extractos de plantas.

Una alimentación equilibrada y una escucha activa de su cuerpo deben permitir asegurar una digestión sin problemas; pero en caso de problemas la fitoterapia puede ayudar de forma no despreciable ¡sería una pena privarse de ella!

¡No podemos acabar este artículo sobre la digestión sin mencionar el complemento alimenticio de referencia en la materia: Probio Forte! No se trata de una planta, pero es algo 100 % natural: consiste en una mezcla de cinco especies de probióticos (8 mil millones de bacterias beneficiosas por cápsula) capaces de modificar muchos parámetros fisiológicos y metabólicos como el refuerzo de la barrera intestinal y la optimización de la digestión.

Referencias

Thamlikitkul V, Bunyapraphatsara N, et al : Randomized double blind study of Curcuma domestica Val. for dyspepsia. J Med Assoc Thai. 1989, Vol. 72(11), pp 613-20.
Niederau C, Gopfert E. : The effect of chelidonium- and turmeric root extract on upper abdominal pain due to functional disorders of the biliary system. Results from a placebo-controlled double-blind study. Med Klin. 1999, Vol. 15, n° 94(8), pp 425-30.
Madisch A, Heydenreich CJ, Wieland V, et al. : Treatment of functional dyspepsia with a fixed peppermint oil and caraway oil combination preparation as compared to cisapride. A multicenter, reference-controlled double-blind equivalence study. Arzneimittelforschung. 1999, Vol. 49, pp 925-932.
Holtmann G, Adam B, Haag S, et al. Efficacy of artichoke leaf extract in the treatment of patients with functional dyspepsia: a six-week placebo-controlled, double-blind, multicentre trial. Aliment Pharmacol Ther. 2003;18:1099-1105.
Bundy R, Walker AF, Middleton RW, Marakis G, Booth JC : Artichoke leaf extract reduces symptoms of irritable bowel syndrome and improves quality of life in otherwise healthy volunteers suffering from concomitant dyspepsia: a subset analysis. J Altern Complement Med. 2004, Vol. 10(4), pp 667-9.
Jacobs BP, Dennehy C, et al. : Milk thistle for the treatment of liver disease: a systematic review and meta-analysis. Am J Med. 2002, Vol. 15, n° 113(6), pp 506-15.
Schulz V, Hansel R, Tyler VE : Rational Phytotherapy: A Physicians' Guide to Herbal Medicine, 3rd ed. Berlin, Germany: Springer-Verlag; 1998:216.
Melzer J, Rosch W, Reichling J, et al. : Meta-analysis: phytotherapy of functional dyspepsia with the herbal drug preparation STW 5 (Iberogast). Aliment Pharmacol Ther. 2004, Vol. 20, pp 1279-87.