Adelgazantes: los 4 mejores complementos alimenticios quemagrasas

Los mecanismos de acumulación de las grasas

El tejido adiposo es sin duda una de las razones por las que la humanidad ha logrado sobrevivir durante millones de años a las hambrunas, a las enfermedades y a los enfriamientos y calentamientos climáticos (1).

En efecto, se considera que un hombre esbelto y sano de 75 kilos tiene una reserva de energía de aproximadamente 100.000 kilocalorías en su tejido adiposo, lo cual es considerable.

El problema es que los adipocitos, unas células capaces de acumular los ácidos grasos excesivos en forma de triglicéridos, tienen una capacidad de almacenamiento casi infinita. Y lo que es peor, estudios recientes tienden a demostrar, contrariamente a lo que se pensaba desde hace años, que el cuerpo es capaz de fabricar nuevos (2).

Por consiguiente, cualquier exceso de aportes de alcohol, de azúcares simples o de grasa provoca una acumulación de grasa en los adipocitos. En realidad, toda caloría excesiva es convertida en triglicéridos almacenados en los adipocitos: si usted consume más calorías de las que gasta, usted acumula grasas.

Esta es justamente la gran enfermedad de los siglos XX y XXI: un modo de vida sedentario con poca actividad física, una alimentación rica (en número de calorías consumidas) pero también rica en alcohol, en grasas y en azúcares simples producen una pandemia mundial de obesidad y de sobrepeso: el número de casos de obesidad casi se ha triplicado desde 1975 y, en 2016, el 13 % de la población mundial era obesa, de un 39 % con sobrepeso (3).

La Garcinia cambogia para evitar la acumulación de grasa

Conocida también como tamarindo malabar, la Garcinia cambogia es un árbol de la familia del mangostán con frutos cuya cáscara se utiliza desde hace milenios, en particular como condimento en la cocina asiática pero también en la farmacopea tradicional.

Unos estudios recientes han podido demostrar in vitro los efectos del principio activo de la Garcinia cambogia en el organismo. El ácido hidroxicítrico se supone que, en efecto, inhibe la ATP-citrato liasa, que transforma los azúcares en grasa. Además, otros estudios han demostrado un efecto inhibidor del apetito del ácido hidroxicítrico, cuyos beneficios usted puede disfrutar con algunos complementos (como Garcinia cambogia estandarizado a un 60% de ácido hidroxicítrico) (4).

Por esta razón la Garcinia cambogia es hoy en día reconocida como una ayuda que contribuye a controlar el peso corporal y a disminuir el almacenamiento de grasas contribuyendo al mismo tiempo a mantener un nivel de azúcar en sangre normal.

El Coleus forskohlii para degradar las grasas

Planta perenne de la familia de las lamiáceas, el Coleus forskohlii, también conocido como boldo de la India, se utiliza desde hace milenios en la medicina ayurvédica.

Pues bien, esta planta contiene un diterpeno que es en realidad su principio activo más potente: la forskolina. Esta última actúa en la adenilato ciclasa, una enzima implicada en la lipólisis, es decir, la degradación de las grasas contenidas en los adipocitos (5).

Por tanto, el Coleus forskohlii debería formar parte de su arsenal para combatir la acumulación de grasa: su contribución al control del peso y al metabolismo de los lípidos es conocida. Usted puede encontrarlo, en sinergia con otros principios activos y plantas naturales, en algunos complementos dedicados (como Advanced Fat Burner)

El regaliz contra la grasa visceral

Consumido en el mundo entero desde hace milenios, de África a Asia, pasando por la cuenca mediterránea, el regaliz es una planta muy conocida por los aficionados a las golosinas azucaradas, pero menos conocido por sus efectos en la salud.

En efecto, al contenerácido glicírrico y flavonoides bioactivos potentemente antioxidantes como la glabidrina, el liquiritósido o el isoliquiritósido, el regaliz contribuye a la salud gastrointestinal e inmunitaria , al mantenimiento de la piel y tiene también propiedades antioxidantes.

Lo que también se sabe menos, es que unos estudios recientes tenderían a implicarlo en la pérdida de grasa visceral, esta grasa situada debajo de los músculos del abdomen, alrededor de los órganos y presente en gran cantidad en las personas con sobrepeso u obesas (6).

Por tanto, para que le ayude a conservar su buena salud y a combatir las grasas excesivas, opte por el regaliz (por ejemplo, por Viscerox, complemento extraído de la raíz del regaliz y estandarizado a un 30% de polifenoles y un 3% de glabidrina).

La guindilla para aumentar el metabolismo

Realza los platos y le hace a usted transpirar sin esfuerzo: la guindilla es un condimento temido por algunos y querido por otros. Lo que se sabe menos, es que la molécula que le da su sabor picante, la capsaicina, tiene también efectos beneficiosos para la salud.

Si bien actualmente se utiliza sobre todo en tratamientos médicos para el control de los dolores neuropáticos, la capsaicina está empezando a utilizarse para combatir la obesidad.

En efecto, la capsaicina activa los nociceptores TRPV1 que están implicados en el aumento de la temperatura corporal y la sensación de dolor. Al hacer esto, los receptores transfieren calcio a las células. Esta operación estimula la biosíntesis de las mitocondrias, aumenta la síntesis de las proteínas musculares y provoca la secreción de adrenalina (7-8).

En resumen: la capsaicina aumenta el metabolismo basal, es decir que ésta estimula el consumo de calorías de su organismo. Y esto, favoreciendo a la vez la saciedad.

Esta es la razón por la que la guindilla es reconocida por contribuir al buen control del peso y también debe formar parte de su arsenal para combatir la acumulación de grasas (así que está presente, en sinergia con la Garcinia cambogia citada más arriba y con otros múltiples compuestos interesantes, en el complemento Metadrine).